Divino Pecado, en Viña del Mar.
El Divino Pecado es un restaurant italiano que lleva 10 años funcionando justo al frente del Casino de Viña del Mar, en la calle San Martín. Es un negocio familiar, como todo buen restaurant italiano que se precie. No tiene mas de 20 mesas, lo que hace que puedan controlar bastante bien todo lo que pasa en la cocina y como se atienden a sus comensales.
Por sus dimensiones, decoración y tipo de comida el restaurant pareciese que invitase a tener una experiencia familiar y acogedora, pero los mozos no acompañan en esta línea, si bien estan bien informados y son atentos, son mas bien secos y formales.
La carta esta mas bien cargada hacia las pastas, aunque tambien podemos encontrar: confit de pato, calamares rellenos, entrañas al merquén, callitos (guatitas), mollejas, y varias otras preparaciones mediterraneas.
La carta de pastas esta dividida en pastas con verduras, con pescados y mariscos y carnes. Me fui por el lado de los pescados y mariscos, elegí los ravioles negros ($8.900 pesos): masa con tinta de calamar, gambas al curry y tomate natural.
Un bello plato, en el que lamentablemente la tinta de calamar se comía el sabor de las gambas al curry, una verdadera lástima. Me quedé con las ganas de sentir el sabor a las gambas al curry mezclado con la tinta de calamar. El tamaño de la porción era mas bien pequeña, es un plato que esta pensado para ser acompañado con una entrada, cosa que lamentablemente no hice.
De la carta de pastas con verdura probé el Tortelli rellenos con espinacas y ricota, con mantequilla y salvia ($8.000).
Nuevamente una bella presentación, esta vez sí un gran sabor, muy delicado y elegante. Es un plato liviano, servido en una porción mas bien limitada.
Me llamaron la atención los altos precios de los bebestibles: una cerveza $3.500 pesos, un pisco sour $3.200, y un agua mineral $1.500.
Al final, me quedé con sensaciones encontradas con el Divino Pecado, si bien se nota oficio en la cocina, hay problemas con las porciones y con el resultado de algunos platos, lo mismo pasa con el servicio, quieren ser un restaurant italiano de familia y amigos pero el servicio es mas bien formal y seco. Por último, los precios me dejaron con la sensación de que se paga mas de lo que se entrega. Nada de lo que digo es grave y es de fácil solución, además tienen el potencial en la cocina para ser un gran lugar de comida italiana.
A Alvaro Portugal
Fundador de la empresa de Tecnología y Estrategia Digital Blue Company, creador de LaBuenaVida.cl, Vicepresidente de la Corporación por las Cocinas de Chile: PEBRE, Presidente de la asociación gremial de empresas de tecnología: ChileTec AG, y Columnista de la Revista gastronómica: Varietal.