Déjate besar - Ni pudimos entrar
El viernes pasado descubrí que el restaurant Déjate Besar tenía descuento para socios de La Tercera y decidimos ir a comer. Hace un par de meses habíamos ido al Déjate Besar, porque queda en nuestra comuna, Lo Barnechea, que recién está comenzando a tener oferta gastronómica interesante, y, la verdad, lo encontramos rico, pero un poco caro.
Fuimos sin reserva y estaba todo lleno. Uno es sabe que puede suceder esto cuando va sin reservar. Sin embargo, me molestó la actitud que tuvieron en este lugar, porque simplemente nos dijeron no hay nada y nos dieron la espalda. La persona que nos recibió fue a preguntar a una muchacha que andaba con una muleta, ella dijo no hay espacio, ninguna de las personas nos miró, ni nos dijo nada más. Nosotros observamos este diálogo y entendimos que nos teníamos que ir al notar que éramos ignorados por ambas personas. Un restaurant que valora a sus clientes, en primer lugar, tiene una actitud más empática y educada, y, en segundo lugar, informa tiempos de espera. Nada de eso sucedió en este lugar.