La Uruguaya una parrillada con productos únicos
Caminando por calle Rancagua, entre Vicuña Mackenna y el Parque Bustamante me encontré con este pequeño boliche, con un gran ventanal que nos muestra su generosa parrilla tal como en los barrios del porteño Buenos Aires. No pude sustraerme a mis recuerdos y teniendo un compromiso esa noche me prometí volver para lo cual anoté la dirección, el nombre y su sitio web: www.lauruguaya.cl A la mañana siguiente llegué directo a buscar lo que ofrecía y me encontré con algunas sorpresas que partí a descubrir con un grupo de amigos a la hora de almuerzo; pamplonas, morcillas y chorizos.
Es un lugar pequeño, no más de diez mesas, un poco frío y no muy acogedor, pero esos detalles importan poco a la hora de probar los manjares que ofrecen. Ordenamos una parrillada especial (éramos 3) que traía 3 chorizos, 2 morcillas, una pamplona, tres pedazos de lomo y dos pedazos de asado de tira, con un costo cercano a los $ 11.000. La acompañamos con una ensalada grande y cervezas, ya que no tienen buenos vinos. Los productos de la parrillada realmente "espectaculares". La morcilla, que es muy parecida en su aspecto a nuestra prieta, una verdadera delicia: rellena con nueces y un verdadero paté de cerdo en su interior; el chorizo, a diferencia de nuestra longaniza que es 100% cerdo, se compone en un 70% de carne de vacuno y cerdo y el 30% restante de condimentos y tocino lo cual lo hace ser de un sabor mucho más suave y una textura más compacta, verdaderamente rico; la carne de muy buena calidad: el asado de tira, de costilla delgada, blando y a punto. Pero el gran descubrimiento de esta verdadera "picada" son sus pamplonas, que consisten en un arrollado de pechuga de pollo relleno de queso, tocino y pimentón, cubiertos por una membrana que debe ser algo así como la tripa que recubre las longanizas, de suave y sútil presencia, macerado por algunos días en un muy uruguayo chimichurri, una verdadera delicia.....
Al boliche le faltan algunos detalles para hacerlo más acogedor, pero sus carnes y embutidos ameritan visitarlo. Tuve la ocasión de conversar con su dueño, un uruguayo avecindado hace más de 20 años en este país, cuyas fotos con uruguayos ilustres del fútbol y la política adornan las paredes del local, quien me contó que él es el fabricante de los productos que se expenden en el local y que por eso también se venden para llevar envasados al vacío; las morcillas a $ 3.200 el kilo, los chorizos a $3.600 y las pamplonas a $2.600 la unidad, para quienes gustan de los asados en casa una verdadera picada de productos únicos y para quienes se animen a comer en el boliche, los sabores los llevarán por un instante a las humeantes parrillas del mercado del puerto en Montevideo.