Queridos amigos de la Buena vida escribo hoy para comentarles una particular experiencia en un conocido local de comida peruana. Muchos deben haber escuchado de el ají seco, una puerta muy sencilla te recibe de la mejor manera con una mirada directa a la cocina donde WOW te encuentras con el plato de saltado de mariscos más grande que al menos yo haya visto, solo con esa referencia subes al segundo piso donde la cantidad de gente te abruma, todos felices probando sus platos y una tentadoras papas a la huancaina
Todos o casi todos los garzones son peruanos y su servicio es acogedor y más aun cuando traen unas salsitas exquistas bien picante y pancito.
La carta muy grande tienes mucho de donde elegir, harto picoteo recomiendo que no lo coman por que suele ser muy grande a no ser que tengan un apetito dinosaurico como mi pololo y yo (jajaja) unas brochetas de corazón entre otras delicias.
Pero lejos el plato de fondo fue lo que más me impacto. Filete en salsa de pisco con trisotto verde, y no era arroz, el trisotto era nada más ni nada menos que mote, preparado al mejor estilo risotto italiano. Y debo decir que estaba muy pero muy bueno la carne blandita y jugosa con el punto exacto de salsa. Para mi acompañante un saltado de lomo con papas fritas y ensalada. Y de postre un suspiro limeño.
En general el lugar es muy bueno, la atención es rapida, sabrosa , los paltos son generosisimos. Se que en santiago hay varios restaurantes de comida peruana buena, bonita y barata. Pero podria catalogarlo como el Tanta popular.
Besos a todos...
