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Este restaurante está un poco escondido, a las faldas del Cerro San Cristóbal junto a la estación del Teleférico que está al final de Pedro de Valdivia. Es segunda vez que voy. Ambas veces he estado muy a gusto, ya que en invierno el salón estaba muy bien climatizado. Acogedor. Ahora fui a almorzar y lo hice en la terraza, a la sombra de un hermoso Encino. No se si detrás de esto hay diseño o no, ya que una parte importante del restaurante esta en remodelación, sin embargo les debo contar que hace un buen rato no estaba tan a gusto comiendo. El entorno invitaba a una buena sesión de Yoga Ibérico (Siesta). Esta terraza esta de pelos, de verdad recomendable.
Con relación a la comida, no me voy a referir a la variedad de cocina italiana que caracteriza este lugar. Solo me voy a detener en la carta de comida típica, que esta remarcable. Ordenamos un arrollado de malaya, como entrada y de fondo ... unos increibles porotos granados con longaniza!. Esta orden siempre es una riesgo de consecuencias tardías, pero que en este caso valió la pena. Los porotos tenia finos toques de merken y la longaniza estaba deliciosa, mítica, como traida de Chillán (¿Han oido un lugar mas común que ese?). Otros comenzales probaron la plataeda y el costillar. En general, la opinión fue buena. Todo Bien!.
Divertimento. Un buen lugar para almorzar laaaargo, en familia y con caminata incluida, por ejemplo, al jardin japonés del Cerro. Todo un panorama!
Divirtemento
\tAv. El Cerro, esquina
\tPedro de Valdivia Norte
\tFono: 2331920-2334989
Valor por persona: $8,500
