Después de un mes de receso por paternidad, estoy de regreso en las canchas de LBV, disfrutando de lo sorprendente que es para comer mi hijo (debe haber salido al padre) y gozando de los resultados de la dieta estricta que llevo desde hace meses, pero este fin de semana, con familia incluida (suena lindo) me fui de regaloneo donde mi madre a mi amado Peñaflor y como mi madre sabia que entre pañales, sacada de chanchitos, levantadas cada 3 horas etc., me espero con algo que me mata, nada menos que Ensalada de Porotos con Penca, pero con “verdadera Penca”, no de alcachofa, sino la que sale en los potreros del campo, es mata grande llena de espinas, la que deja los dedos negros después de pelarlos.
Yo como buen amante de las verduras y legumbres me comí casi solo la fuente de la foto, claro que hasta hoy sufro con los resultados posteriores (todos comprenden, cierto?).
Así que ya regrese, con camara nueva, más píxeles, así que me tendrán nuevamente comentándoles mis peripecias gastronomitas desde cualquier parte de chile, y si dios lo quiere, desde el exterior.
Nos vemos luego con otro rico platito degustado por este humilde servidor
Saludos
Coco Peralta
