Ostras Azocar. Un reencuentro memorable
Este domingo tuve un reencuentro memorable ... Hace un tiempo (quizas como muchos) vi la triste noticia de que el legendario lugar de Ostras Azocar habia sufrido un incendio, y temi ya no poder degustar nunca mas de su excelente cocina...Pues bien este fin de semana para mi agrado, fuimos con mi familia a almorzar alli, tras saber la noticia de que ya estan nuevamente funcionando.
Como pasamos "por si acaso", imprudentemente llegamos sin reserva, asi que para que nos dispusieran una mesa tuvimos que esperar un poco. Con todo, fue increiblemente grato para mi ver que a pesar del fuego sufrido, la arquitectura del lugar se conserva casi intacta. De hecho a simple vista parece ser que los cambios se resumirían a la perdida de las las fotos de la farandula politica y social, y algunas variaciones en la disposicion del recinto. Nada muy grave...Asi, luego de un tiempo mas que razonable dado nuestro numero, pasamos por la obligatoria degustacion de ostras...Que quieren que diga...Imperdibles, para los que han alguna vez ido, saben de lo que estoy hablando.
Una vez sentados y con el apetito abierto por lo anterior, al leer la carta me di cuenta que la seleccion de platos está mucho más reducida que antaño, cosa que por lo que he conversados con mis amigos relacionados con el rubro de los restaurantes y de la gastronomia, solo puedo hablar mejor del restaurant, dado los tiempos de demora y la frescura de los productos...Como dije como eramos muchos y andabamos con mi hija, Una vez elegidos los fondos, para esperar nuestra orden pedimos machas a la parmesana y unos pisco sour a la peruana. Sin temor a equivocarme creo la preparacion de las machas en este lugar son las mejores de Santiago...y de hecho ni en regiones me he topado con esta calidad. Además el plato es sumamente abundante, por lo que los 5 comensales asistentes mas la Martina (?!!) quedamos de lo más felices (otro punto por el pisco sour jaja)
Termiando el entremes de las machas, no tuvimos que esperar mucho tiempo más y nos trajeron los platos de fondo. Las elecciones en este caso fueron multiples (caldillo de congrio, mero, lenguado, corvina) pero sin desmerecer el resto de los platos, lejos la mejor fue el plato azocar que consistia en 2 ceviches (unos de salmon y otro de corvina) con camarones ecuatorianos apanados y camarones de rio hervidos. Que cosa más rica!!!. Obviamente, para hacer un justo equilibrio de los platos, estos debian ser acompañados por un heladito vino blanco, por lo que el elegido en esta ocasion fue un savignon blanc de la viña la rosa...Uf!!
Ya un poco culposos por tan opipara cena, terminados los fondos, compartimos unas tortas de merengue lucuma y una de merengue fambuesa...Eran iguales a las que hacia mi abuela!!! Nada, que decir...Sublimes
En definitiva, si tuviera que decir algo malo de este restaurante, lo unico que puedo reprochar es que la acustica no da para que el señor de la guitarra se pasee entre las mesas, y necesariamente buscar la atencion de alguno de los antiguos mozos del local, que creo son los que dan una nota de distincion en cuanto al servicio.
General Bulnes 37
Vayan, no se arrepentiran!