Ayer fui a Metropolitana, un restaurante de la calle Huérfanos a la altura de la plaza Yungay, interesante pensé yo cuando en la oferta de un club de descuentos me ofrecieron una cena de pastas para dos mas una botella de vino tinto que originalmente tiene un valor de 15mil a solo 7500. Lo compré hace casi un mes y medio. Ayer estando con el ánimo de algo diferente hice la reservacion respectiva y fuimos.
Al llegar al lugar me dije ootra vez! Un lugar tipo restobar! con apariencia casi magnetica para el profesional joven exitoso criollo, de esos que se compran un par de japi ahuer con presto(...). El humor estaba bueno asi que entramos y conocimos al displicente señor que se ubica en la caja y es quien supongo tomo mi reserva, le di mi nombre y me indico una mesa. Preferimos el segundo piso (tiene dos niveles, el segundo para fumadores) un lugar acogedor, parecido en parte a un mini salon vip de discoteca farandulera, con sillones y sillas estilo Central Perk, algo que atraiga a los grupos aspiracionales y fomente la ascencion social a traves del consumo de productos sobrevalorados a fin de sentirse parte de la gran fiesta del consumo que no perdona a nadie.
Nos atendio una excelente persona, nos ofrecio todo lo que hubo a su alcance, y tuvo en parte que poner la cara por el lugar.
En la cena de pastas estaba incluida una botella de vino, me encantó la promoción! me gusta salir a comer y me gusta conocer lugares nuevos, asi que partimos, mas aun siendo ayer un dia especial.
El platillo unico constaba de unos tallarines del numero 5 estaban entre luccheti o carozzi, no mas ni tampoco menos, unas tirillas de cascara de limon y un par de hojas de menta encima ....
El vino era una botellita pequeña para dos copas, pero se nos dijo que habia happy hour de tragos, a todo esto eramos los unicos comensales del lugar a esa hora (20:30).
Pedimos luego de comer medio plato de tallarines, (porque eso, si bien genéricamente es pasta, eran simples fideos de almacen) no pudimos más, un par de tragos para conversar un rato y fumar un cigarrillo. Cuando terminamos el primer vaso de la promocion de tragos nos dicen que era muy tarde y por lo mismo la promocion se acababa para los proximos tragos, pensamos que no seria problema, ya que nos quedaba el segundo de cada uno y comprariamos otra bebida mas y bien, sorpresa.... nos trajeron UN solo happy hour para los dos porque asi lo penso quien los servía por lo tanto no habria un segundo vaso ya que fue una promocion para los dos,,, le dije a la dama en cuestion que en ninguna parte los tragos bajo esta modalidad se compartian asi yq ue siempre pensamos que vendria el siguiente, fue a preguntar y no volvio mas. Pedimos la cuenta por EL japi auer y nos fuimos..... DEFINITIVAMENTE PARA NO VOLVER JAMAS. EN TOTAL GASTAMOS COMO 15MIL PESOS CON EL JAPI Y UNAS BEBIDAS. PARA UN PLATO QUE NO COSTO MAS DE 1500 PESOS Y PARA UNA BOTELLA DE VINO INFIMA Y UNA ATENCION QUE NO SE SI ESTARA RESERVADA PARA GENTE CON ALGUNA APARIENCIA UN POCO MAS PREPOTENTEMENTE OSTENTOSA, NO SE, EN REALIDAD NO ME INTERESA, pero me siento estafado.
El lugar fisico es bastante agradable luego que se te acostumbra la pupila a la oscuridad, pero lo demas, señores no lo recomiendo, mil veces mejor cualquier local de pastas o derechamente comprarlas frescas en el supermercado ponerle 4 camarones y echarle salsa de tomates.
muchas gracias.
