Mare Nostrum, mucho ruido pocas nuces

El miércoles fuimos almorzar con mi marido a Mare Nostrum, teníamos bastantes expectativas pero salimos muy decepcionados.

El lugar, una casona antigua ubicada en plena Providencia, aporta un sello hogareño que se desmorona al ingresar por la ausencia de calor...estaba bastante helado y para mitigar el frío el mozo instaló una estufa recién encendida, por lo que tuvimos que soportar, por un momento, el olor a parafina, muy incómodo.

La atención del mozo para tomar el pedido fue rápida, lo mismo para la llegada del pisco sour que era muy bueno. Lamentablemente al solicitar vino en copa solamente contaban con una marca (Casillero del Diablo) buena pero falta variedad.

Para la entrada nos decidimos por un piqueo caliente que consistía en: tres machas a la parmesana (mucho queso y las machas muy pequeñas), tres brochetas de camarones y ostiones, tres champiñones rellenos y chicharrón mixto, que para mi gusto era demasiado y se enfriaron rápido.

Lamentablemente el piqueo se demoró bastante en llegar pero lo peor fue cuando recibimos nuestros platos de fondo que eran: Picante de camarones acompañado con arroz (que viene en un plato aparte) y Delirio de un loco que consiste en corvina gratinada con jaibas, alcachofas y camarones. Los platos estaban muy calientes pero la comida estaba tibia y pasó a fría en un segundo.

Para el postre nos ofrecieron una bandeja de variadas cosas pero que les faltaba lo principal, el suspiro limeño. Al solicitarlo el mozo tuvo que ir a preguntar si había, para suerte nuestra si y estaba bastante bueno, dulce en su justa medida.

Rescatable: la carta que era muy entretenida para leer por los nombres de los platos, el pisco sour, el suspiro limeño.

La cuenta fue $54.890 incluída propina del 10%. Caro para lo que es y más caro ya que el mozo nos dió un valor de $7.600 por el piqueo y lo cobraron a $21.000 en la cuenta.