Cocina India, otra mirada.
¿Cómo podercompartir la experiencia, sin quedarme corta o ponerle demasiado color? Estavez no me inscribí en un curso o taller de cocina (como otras); también fuí invitada.
Fue una todauna experiencia, salí contenta; sabiendo un poquitín más de cocina de la India, yhabiendo “aprendido” a preparar lo que tan bien dejó descrito Felipe, ahora hayque ensayar en casa; después de haber mirado atentamente el paso a paso,anotado y escuchado atentamente las explicaciones (traducidas).
Si tuvieraque describir lo visto y probado, me centraria en especias, aromas y sabores, en los que resaltanla combinación de condimentos y hierbas aromáticas; las preparaciones quevimos esta vez con salsas.
Por lo que escuchamos las variedadesregionales son hartas, incluso las preferencias alimentarias distintas; unoscomen carne, otros no. La cosa depende de creencias y religión. Toda cocina con alto valor medicinal“ayurvedica” prolongadora de vida. Nos recalcaron la preocupación por la saludy las propiedades afródisiacas (de las especies).
Cardamomo,cúrcuma, comino, jengibre, ajo, cebolla, clavo de olor, anís estrella, canela,ají, menta, cilantro, laurel, ayuwain (potenciador de sabor, cómo el glutamato)y otras.
Noscontaron en Rishtedar que privilegian la comida más del norte; porque puede sermás cercana a nuestro gusto. La del sur con más vegetales y coco. Losvegetarianos encontraránvarias preparaciones, lo que es yo volveré por unas tentadoras berenjenas de la carta.
También había tenido encuentros anteriores con comida India, la primera lejosde acá y fué para salir de la curiosidad; me encantó. Luego pasé varias vecespor el primero que hubo en Santiago y después por el del centro; ambos muy buenos pero nopodríamos decir baratos.
Me llamó la atención lapreparación del arroz Mater Pulau, distinto al que hacemos en nuestra cocina,o en la China, japonesa o de las paellas. Enel recipiente se comenzaba por calentar suavemente el aceite, agregar comino yotros condimentos, agua fría, sal una pizca de azúcar, un poco de crema, aguade rozas, arvejas, el arroz basmatipreviamente pasado por agua, no para sacar el almidón, sino que parahumectarlo. Se le da hervor y se deja a fuego bajo unos 10 minutos (no vimosesa parte), pero lo interesante es que al estar listo le pusieron un trozo detoalla de papel y quedó tapado, esperando a servirlo. Eso para que los aromas se mantengan e imprengen.
Cada rato que iba pasando másaromático se tornaba, una maravilla.
Cuando comentaron que habíanimportado un Tandoor (horno de barro), quise verlo. Me picaba la curiosidad porver similitudes o diferencias con nuestros antiguos hornos chilenos de barro.Ná que ver!
Complicado que a una la dejenpasar a la cocina de un restaurante, no está permitido. Así que agradecí muchola excepción; me cubrí el pelo con un gorrito y partí a curiosear. Como ven es un cilindro dearcilla, al fondo se prende carbón hasta que las paredes y el interior lleguen a la temperatura necesaria, paracocer comidas y panes, el nan en los bordes. Este Tandoor es para restaurantes,así que está en un “mueble” de acero inoxidable, la cubierta idem; para quecumpla con las normas sanitarias.
Comó pasé por distintas partes dela cocina, supongo la sala de frío y las otras; como tengo ojos , obviamentemiré. Me impresionó gratamente ver el orden y la limpieza, estaba todoreluciente. Les comento porque a veces uno tiene dudas de cómo serán las cocinas,con tanto reportaje y cero aroma a condimentos, buena campana!.
A mi me encantó el lugar, es gratoy acogedor digamos "moderno