Caramagnola, un lugar especial.
Hace un par de semanas un par de amigos, con ganas de celebrar el fin declases, me invitaron al bar Caramagnola, ubicado en Bilbao 4471. La verdad, ibacon mucha inseguridad al encuentro, no por la compañía, sino porque uno siempreesta dudoso de los lugares nuevos. En fin, me dijeron que me bajara en metro Bilbaoy caminara hacia arriba. Pensé en una caminata eterna, pero para mi sorpresa,solo eran 10 minutos.
Llego al bar y es.....distinto. Tiene su onda. Su propia vibra. Es mas acogedorque otros lugares, tiene un dejo de casa antigua que es difícil de obviar.Aparte de eso, el hecho que este la mayoría de las mesas este al aire libredeja el sentimiento de que uno es parte del todo, que es la ciudad entera. Alrato que me siento y pedimos la primera ronda de cervezas, noto la decoración yes peculiar. No es normal que se mezcle la cerveza con las bicicletas. Pero después,hablando con una amiga, me explica que "caramagnolaes la botellapara tomar agua de las bicicletas (Ni idea que así se llamaban). Y ahora todo cuadra. Aparte