Hola, hasta ahora sólo me había remitido a seguir este sitio, pero en vista a mi pésima experiencia de ayer en el Benihana del Parque Arauco me animé a incribirme y comunicarlo.
Antes había ido a este restaurante y me había gustado bastante, en función de ello es que elegimos pasar nuevamente a almorzar. Que en un local de comida específica te reciban preguntandote por qué especialidad vas a querer para decidir dónde sentarte, si quieres teppanyaki o no, nos pareció un poco descolocador, porque a menos que estés muy interiorizado de las distintas preparaciones lo único que van a lograr es desorientarte. Nos dijeron que para las mesas de adentro (teppanyaky) había espera o si deseabamos podíamos sentarnos en la parte de adelante y que se podía pedir de todo pero sin el show de la cocina en la mesa. Ningún problema con ello.
Ordenamos un par de jugos y los platos que deseábamos, no recuerdo sus nombres, pero eran una carne y un pollo apanado sobre arroz y unas salsas.
Algo ya impaciente por la demora decidí ir al baño a lavarme las manos para matar el tiempo y ¡Sorpresa! no había jabón ni papel para secarse las manos. Tuve que acercarme a la caja para informarles que no tenían de nada en el baño.
Tras más de media hora de espera, los jugos se habían bebido mucho antes, llegó una sopa miso y otros 10 minutos más tarde los platos calientes, antes debimos preguntar si iban a tardar mucho más.
De la comida no puedo decir mucho más, estaba bien y sabrosa, sin embargo la experiencia fue desastrosa, todo esto con música de fodo de un dvd de Black Sabath (que escuchamos dos veces en el intertanto) muy poco apropiada para comer y mucho menos en un lugar de por sí ruidoso y que no sea un bar.
Claramente el lugar tiene serios problemas, me arrepentí de no haber esperado las mesas de adentro donde al menos te cocinan y sirven en el momento y no con una excesiva demora. Que el baño esté descuidado y sin lo básico -Jabón- me hace pensar pésimo de la mantención del lugar.
De más está decir que no tengo intenciones de volver a entrar al Benihana, si lo único que quería estando dentro era irme de una vez por todas.
Christian A.
