Las inscripciones para la nueva búsqueda del mejor chef joven del Mundo estarán abiertas hasta el 31 de marzo.

Comienza el último periodo para postular al concurso S.Pellegrino® Young Chef 2016, que busca al mejor joven chef del mundo, cuyas inscripciones online se cierran el 31 de marzo. Esta es su segunda versión y espera superar el éxito anterior, donde más de tres mil cocineros de todo mundo soñaron con ser el ganador, reflejando el compromiso de S.Pellegrino® por apoyar a los talentos emergentes.

El procedimiento para sumarse a este desafío gastronómico es sencillo, solo hay que registrarse en www.finedininglovers.com con una receta propia –exceptuando postres– que sintetice lo mejor de la tradición local con la creatividad e innovación de su creador. Esta se debe presentar en inglés y acompañarla de una foto. Los participantes pueden tener hasta 30 años y deben estar trabajando en un restaurante como chef, sous chef o chef de partie, desde al menos un año.

Las recetas de todo el mundo serán evaluadas por el centro italiano de formación de cocina ALMA, que hará una selección de 10 platos por cada zona geográfica, con los criterios de los ingredientes, las habilidades, el ingenio, la belleza y el mensaje. Esos escogidos competirán entre ellos en finales regionales, cuya versión para Latinoamérica y el Caribe se realizará el 7 de junio en Santiago de Chile. Los jurados serán los chefs Rodolfo Guzmán (Chile), Rodrigo Oliveira (Brasil), Diego Muñoz (Perú) y Mikel Alonso (México). El ganador competirá en la final mundial en Milán, Italia, el 13 de octubre.

La experiencia de ser Young Chef

“Fue un gran honor y me siento encantado de haber sido nombrado el S.Pellegrino® Young Chef 2015. El camino hasta aquí ha sido inolvidable, una experiencia única que guardaré por siempre. He conocido a tantos chefs fantásticos a lo largo del proceso y este título le ha dado un gran giro a mi carrera”, comenta el irlandés Mark Moriarty. Él ganó la gran final 2015 con solo 23 años, gracias a un innovador plato de apio al horno, una delicia vegetariana que con sofisticadas técnicas deslumbró a los jurados.

El joven cuenta con una promisoria carrera que se ha visto impulsada por su triunfo. Este año está desarrollando una gira mundial que bautizó como “Sabores de Irlanda”, que lo está llevando por capitales de Europa, América y Asia con el objetivo de mostrar la propuesta gastronómica contemporánea de su país, de la que es un orgulloso representante.

Por su parte, Latinoamérica y el Caribe tuvo el orgullo de ser la única región representada por una mujer en S.Pellegrino® Young Chef: la peruana María José Jordan, quien logró llegar a los tres finalistas entre 20 participantes de todo el mundo. Su postre “Técnica Inmortal” brilló por su factura de alta cocina, protagonizada por emblemáticos ingredientes de Perú. A su vez, la joven fue la ganadora de la categoría Mejor Dupla Joven Chef & Diseñador, junto a la ítalo-brasileña Paula Cademartori quien diseñó un clucht inspirado en su plato, en las menciones que eligen los invitados a la premiación y en web, que recogió el voto online desde todos los rincones del mundo.

A los postulantes a Young Chef, les recomienda vivirlo desde la experiencia: “Que den el 200% y con el corazón. Lo más valioso de nuestra noble profesión es recordarnos constantemente que hacemos lo que hacemos porque lo amamos”. Del concurso rescata el trabajo con su mentor, el chef Mitsuharu Tsumura. “Me dio ideas que me ayudaron a redondear mi plato y darle más valor a nivel de insumos, aprovechando los productos de primera calidad que podemos encontrar en el Perú”, cuenta. También valoró compartir con él, hablando de cocineros y restaurantes en los eventos e incluso disfrutando de un partido de fútbol de Ronaldo. “Micha es una gran persona, me entregó muchísimo apoyo, fuerza e ideas. Por momentos me daba la sensación de tener un director técnico más que un mentor de cocina, recordándome las competencias deportivas de mi niñez y adolescencia, lo cual me dio cierta seguridad”, recuerda entusiasmada.

Actualmente, María José está en Bélgica en “In de Wulf”, un restaurante en el medio del campo donde trabajan fermentos, conservas, envejecimiento de carnes, hacen pan y mantequilla en la casa, horno de leña, etc. Un desafío que la tiene muy contenta por todo lo que está aprendiendo, donde estará todo este año. Luego le gustaría cumplir otro sueño: trabajar en alguna pastelería tradicional de Francia. “Sólo me pone feliz haber llegado a Europa a los 25, ¡es otra meta lograda!”, confiesa.