Mestizo

Llegamos al Mestizo un día Viernes alrededor de las 21:45 hrs. sin reserva, ya que al llamar las reservas las aceptan hasta las 19:00, y habíamos llamado a las 19:20 aprox. decidimos ir, si estaba lleno, partiríamos a Borderío. Éramos 4 personas y nos ubicaron inmediatamente, el local estaba bastante lleno pero no a full, es muy bonito, la entrada, la vista, el interior, afuera hacía frio y dentro estaba muy agradable, bien calefaccionado. Partimos con aperitivos, un Emiliano (vodka con arándanos)y mojito, bien ricos ambos, bebida y jugo, de plato de fondo se pidó atún sellado(3 platos) y un mero en costra de jamos serrano, ambos muy buenos, pero el mero estaba sobresaliente. De postre leche asada con pistachos, común y corriente como la que uno prepara en casa, con unos pistachos crocantes arriba un poco de manjar y unos trozos de frutilla, rico, pero nada del otro mundo, un volcán de chocolate que estaba riquísimo con helado de maracuyá que estaba divino y un postre de arroz con leche a la catalana, que dijeron que estaba bueno y la porción era bien generosa. Todo finalizado con un café espresso. El ambiente muy bullicioso, cuando llegamos estaba bastante lleno con mucho barullo de las conversaciones, no sé si había música de fondo, xq si había no se escuchaba, una vez que fué bajando el n° de personas, ya el ambiente se silenció un poco, por esto no lo recomendaría para una cita romántica, es muy ruidoso, si para ir con los amigos a conversar o a celebrar. Es un restaurante muy recomendable. Precio: $90.000 incluyendo propina